domingo, 17 de mayo de 2009

Crónica de una comunión anunciada (primera parte)

El sábado ya tuve la famosa comunión de la prima de Peluchito. Mi primer evento familiopolitítico importante, jeje (si, el palabro me lo he sacado de donde he querido).
Para mí empezó con mi visita a la peluquería. El peluquero me dijo que llegase un poco antes (a la peluquería que yo voy no dan cita, tú vas y con quien te toque te tocó) de la una, que es cuando entraba a trabajar él. Yo obediente, me tocó esperar lo que llegué yo antes más lo que llegó el tarde. Una media hora más o menos.
Yo en principio tenía la idea de ir a casa de Peluchito ya desde allí irme con él y con su familia a la comunión. Pero también creía que no estaría en la peluquería más de una hora. Vamos, lavar y peinar, no tenía que ser tan complicado, ¿no? ¡Pues sí! 2 horas para que me hiciesen el peinado. Y con tanta laca que si alguien se encendía un cigarro a mi lado corría el riesgo de salir ardiendo.
No hace falta decir que no me dio tiempo a ir a casa de Peluchito, por lo que le avisé para que me viniese a buscar a mi casa (cosa que él quería hacer desde un principio) Así pude comer y arreglarme "tranquilamente" (ya estaba atacadita de los nervios y encima mi madre se encargó de decirme antes de ir a la peluquería "no te va a dar tiempo" unas 5 veces y hasta me llamó para decirmelo cuando me estaban peinando ¬¬).
La verdad que entre el peinado y el vestido, iba muy guapa (y no es que lo diga yo, me lo dijo todo el mundo, jejeje). Luego medio discutí con mi madre y mi hermana por el tema del colgante. Mi hermana me dejó una gargantilla muy finita con algunas bolitas. Pero las dos se emperraron en que me pusiera otra con un montón de bolas ENORMES. Y ahí las dije que nanai, que ya bastante emperifollada iba.
Preparé la ropa para el día siguiente junto a los regalos (el de la niña, el de la madre de Peluchito que cumplía años ayer y el del padre que los cumplía hoy) y cuando Peluchito y su familia llegaron, me subí al coche y nos fuimos para allá.
En el camino me dijeron que la comunión empezaba antes de lo que nos habían dicho, por lo que llegamos con la misa empezada. Que por cierto, fue un caos. El cura diciendo cosas casi sin sentido, niños pequeños correteando y gritando por los bancos... Y Peluchito y yo riendonos, disimuladamente claro.
Antes de continuar, quiero dejar muy claro que normalmente respeto mucho todo estos temas aunque yo no sea creyente, pero con la situación era imposible mantenerse serio. Y más cuando vemos que el Cristo del altar en vez de tener las manos encogidas como todos los Cristos que he visto, tenía los dedos índice y corazón de las dos manos estirados, como si estuviera haciendo el símbolo de victoria (O_o). Pero por reírme, me pasó lo que tenía que pasar, me di un buen golpetazo en el pie con uno de los bancos. Castigo divino.
(Y repito, que nadie se ofenda, por favor. Diría que en esa iglesia ni el cura se estaba tomando en serio lo que estaban haciendo allí).
Después nos fuimos a tomar algo a un bar mientras hacíamos tiempo para el banquete. Y ahí conseguí pillar a Peluchito para hacernos una foto los dos juntos. Que ya estaría bien, los dos arregladísimos y guapisimos (él estaba muy muy guapo con su traje, que voy a decir yo) no tuvieramos una foto los dos juntos.
Mañana continúo. Que ya se va ahaciendo tarde y estoy agotada de ayer. Un besote enorme!!

1 comentario:

Intento de princesa dijo...

que hermoso es cuanto ta haces la primera foto con esa personita que tanto amas....

ya quiero leerte mañana